viernes, 12 de diciembre de 2008

cuento de navidad


Sito esperaba sentado en la cama
miraba el reloj en la mesilla y veía neviscar a través de la ventana.
En la habitación cada vez más azul, sentía un oruguear en la barriga
quizá por hambre o... tal vez por miedo

¿Cómo sería esta vez?
¿Cuanto habría de pasar hasta poder volver a ver?

Un gruñido
la visita avisó
Sito hacia la ventana empañada corrió
y con una manga la limpió.

Una sombra recta vio que de la mano tomaba a otra más fina y trémula
La barriga definitivamente se le agrió pues él tenía cara de toro y ella de mula

Resuelto se giró, su lamento secó, un buen trago de saliva tragó y escalera abajo se enfiló


Helías miraba desolado el lugar,
cuanta pena encerrarían esas viejas paredes de piedra
mohosa y fría.
Si pudiesen hablar cuanto tendrían que contar.

Balbina sin embargo algo sabía
y es que, por la desdicha de los desheredados
es fácil llegar a la dicha de los acomodados
así que ella sensación de pesar
no tenía

Éste niño nunca podrá agradecer lo que vamos a hacer por él,
pues ellos sus planes tenían
ya para su churumbel

Estrujaron fuerte sus manos, blancas por el frío
y en la puerta no sabían si esperar algo bueno o darlo por perdido

El pomo giró y dentro encontraron a Sito,
un niño apocado y pequeñito
entre dos hermanas, vaca y mula, encerrado

¡Pasen! -dijo vaca- ¡Adelante! -mulló mula -
con grandes sonrisas y simpatía oportuna

¡No saben el bien que obrará este niño en sus vidas!
A él consagrarán todo momento y su gracia les alumbrará día a día
Mientras, a sito
le daban ganas de llorar y el gesto se le torcía.
¡Cuantas intentonas de vida y cuantas fallidas!

En el camino de vuelta, Helías le contaba
lo difícil que había sido dar con la casa,
que condujeron todo el día y que por la noche
la luz de un coche había sido su guía

Ya en el hogar muchos amigos lo quisieron ver,
dádivas y regalos le hicieron hasta caer el anochecer
En buena disposición todos traían cuanto podían traer
incluso del extranjero vinieron ricos amigos que fueron tres

Sito en el calor del hogar creció
El plato y la comida nunca le faltó
Pero como un pajarito enjaulado se sentía
cuando Helías muy serio se sentaba y le decía:

Has de comprender cuan importantes para esta familia son
valores como el honor, el trabajo, la rectitud o la decencia.
Tampoco nos gustan las actitudes de baja nota o zafias habladurías
así que ya puedes olvidarte de tus alocadas algarabías

Y... ¿qué debo hacer buen señor?

Sólo deberás comer dormir , estudiar y llegado el día trabajar

Pero... a mí me gusta pintar, correr y saltar

Bien, pues todo eso... lo tendrás que dejar
pues ahora tienes una familia que te quiere de verdad.


*Ambientar con Merry Christmas Mr. Lawrence de Ryuichi Sakamoto.

martes, 2 de diciembre de 2008

Suicidil ­®

Becerreando por internet me he encontrado el siguiente anuncio:

Si ud. Está harto de la vida, si le asfixia la hipoteca, su esposa es una pesada, le ha salido un hijo gay, es aficionado a un club de fútbol que no gana con la asiduidad deseada, incluso si es ud. feo y no se soporta, no sufra más. ¡Tenemos la solución!. Suicidil­­®. Ya que no puede vivir dignamente ¡muera con dignidad!

Con suicidil­
® tendrá una muerte digna de un rey, de un millonario o como mínimo de cualquier personaje famoso que salga por la tele.

Suicidil­
® trabaja en tres fases:

[fase 1- Felicidad] A los 15 minutos de haber ingerida la cápsula de suicidil­
®, se genera en su organismo una descarga de serotonina/endorfinas que le transportará a un mundo de felicidad como no habrá conocido antes.

[fase 2 - Alucinación] Unas 3 horas después entramos en la fase de alucinación. Ud. creerá ser su personaje/héroe favorito. Nuestros especialistas han logrado añadir un psicofármaco especial que se imbuye en su psique, averigua quién o qué le hubiese gustado ser o parecerse y le hace sentirse como tal personaje. ¿Siempre ha querido ser Cristóbal Colón? ¿Tocar la guitarra como Jimi Hendrix? ¿Tener lo pechos de Scarlett Johanson? ¿Ser una mesa? ¡Ahora puede!


[fase 3 - Sueño] Según el personaje que ud. elija en la fase 2 tarde o temprano le entrará sueño. Es el momento del adiós. Despídase de su familia o de quien desee y dispóngase a emprender su viaje hacia la eternidad. Rápida, silenciosa y límpiamente. Evítele a su familia la desagradable experiencia de la limpieza y recogida de restos tan propia de otros engorrosos y trasnochados métodos.


Porque no es justo tener que esperar a la naturaleza, toma Suicidil­
®.

También pueden disfrutar de suicidil­
® en otros formatos:

- Suicidil Forte
­®: Efectos pre-morten más prolongados.
- Suicidil Odor Fresh­®: Su cadaver olerá a pino silvestre hasta bien pasados 15 días. No prive a sus seres queridos de un último abrazo.

Suicidil
®, váyase por la puerta grande.